Los seres humanos, al igual que el resto de seres vivos de la Tierra evolucionamos de otras especies gracias a la evolución biológica por selección natural. Esto quiere decir que nuestra especie no ha estado en la Tierra siempre, sino que aparecimos en un momento concreto gracias a que evolucionamos de otra especie de homínidos debido a diferentes mutaciones que nos han hecho tal y como somos.
En la actualidad, nosotros, los Homo Sapiens, somos la única especie del género Homo del planeta, pero no hace mucho compartimos la Tierra con otras especies de homininos muy parecidas a nosotros como los neandertales o los últimos descendientes del Homo Erectus. Imaginad cómo debió ser interactuar con otras especies tan inteligentes como nosotros, ¿cómo entenderían ellos el mundo?
En esta parte del tema vamos a ver como nuestra especie ha evolucionado hasta nosotros, qué especies hubo antes de que apareciéramos nosotros y con qué especies compartimos el planeta antes de quedarnos solos. Una evolución de millones de años que ha producido la única especie capaz de ser consciente de si misma, capaz de crear las obras de arte más sublimes o de viajar fuera del planeta en el que fue creada, pero también capaz de las peores atrocidades: guerras, exterminios, contaminación…
EL GÉNERO HOMO. ¿QUÉ NOS DIFERENCIA DEL RESTO DE PRIMATES?
Nuestra especie y nuestros antepasados más cercanos tenemos ciertas características comunes que nos diferencian del resto de homínidos, primates y demás mamíferos:
- Somos bípedos: Somos capaces de andar sobre las patas traseras (piernas) y mantenernos erguidos y totalmente verticales
- Somos plantígrados: Nuestros pies no son prensiles y el dedo pulgar de nuestros píes está alineado con el resto
- Hipercefalización: Nuestro cerebro es muy grande en comparación con el resto del cuerpo
- Verticalización completa del cráneo: Nuestra cabeza está en línea recta con la espalda, no la tenemos echada hacia delante.
- Conservación de herramientas: Capacidad de crear herramientas y conservarlas para un futuro uso.
El tamaño del cerebro junto con la capacidad de conservar herramientas para usarlas en el futuro es lo que diferencia a las especies del género Homo, de las otras especies de homínidos más avanzadas como los Australopithecus.
En la actualidad el único representante del género Homo es nuestra especie, el Homo Sapiens, que apareció hace unos 200.000 años, pero no siempre hemos estado solos. Otras especies del género Homo, que veremos a continuación son el Homo hábilis, el Homo erectus, el Homo neanderthalensis, especies con las que hemos convivido durante miles años.
LA EXPANSIÓN DE LOS HOMÍNIDOS POR EL PLANETA
La aparición de fósiles de homínidos en distintas partes del mundo ha permitido estudiar cómo evolucionaron y se expandieron.
- Los restos más antiguos pertenecen al Ardipithecus ramidus, especie que vivió en África oriental hace unos cinco millones de años. Aunque aún trepaban a los árboles, se cree que fueron los primeros homínidos en andar de forma erguida.
- El Australophithecus afarensis también habitó el este de África, hace unos cuatro millones de años. Se desplazaba de forma bípeda, alimentándose de frutos, plantas e incluso carroña.
- El Homo habilis ya era capaz de fabricar herramientas de piedra. Desde su localización original en Etiopía, hace dos millones de años se expandió por todo el continente africano.
- El Homo erectus fue el primero que salió de África e inició la colonización de otros territorios, como Europa y Asia.
- El Homo neanderthalensis vivió en Europa en una época glacial y convivió con el Homo sapiens, pero acabó por extinguirse hace unos 25.000 años.
- El Homo sapiens, especie a la que pertenecemos los seres humanos actuales, consiguió extenderse por todo el planeta.
LOS CAMBIOS QUE NOS HICIERON HUMANOS. LEE EL TEXTO Y COMPLETA LA TABLA
Los humanos somos probablemente la especie más rara que jamás ha existido. Tenemos cerebros extravagantemente grandes que nos permiten construir complicados artefactos, entender conceptos abstractos y comunicarnos usando el lenguaje.
No tenemos pelo, nuestras mandíbulas son débiles y nos cuesta dar a luz. ¿Cómo evolucionó una criatura tan estrafalaria?
Nuestros antepasados más lejanos, aquellos de los que descendemos todos los primates, comenzaron a vivir en grupo, eso supuso que cada animal debía moverse en una compleja red de amistades, jerarquías y rivalidades. Así que vivir en grupos puede haber impulsado un aumento sostenido de la capacidad intelectual.
Algunas especies de primates que habitaban los bosques comenzaron una lenta evolución y fueron adquiriendo la capacidad de andar de forma bípeda, sobre dos piernas. Ello les facilitaba adaptarse mejor al nuevo entorno, ya que podían recorrer distancias más largas en busca de agua y alimento.
El cráneo más grande y ligero facilitó el desarrollo del cerebro, un cerebro tan grande necesita mucha energía:
- Oxígeno. Las arterias que llevan la sangre al cerebro a través del cuello se hicieron más grandes.
- Nutrientes. Nuestro cerebro es un gran consumidor de azúcar (glucosa) por lo que antes nuestro cuerpo evolucionó para que los músculos gastarán menos glucosa que se desvió al cerebro
La posición bípeda propició un aumento de su capacidad craneal, lo que a su vez permitió el desarrollo del cerebro. Además, la liberación de las manos y la evolución de los pulgares oponibles favorecieron una mayor habilidad manual, lo que posibilitó la fabricación de herramientas.
La transformación de la laringe, como consecuencia del bidpedismo, facilitó el desarrollo del lenguaje hablado.
En comparación con otros primates, los humanos no pueden morder con demasiada fuerza porque tienen músculos delgados en la mandíbula. Este cambio ocurrió hace entre 5,3 y 2,4 millones de años. Las mandíbulas más pequeñas pueden haber liberado espacio para que crezca el cerebro.
Nuestra dieta también fue un factor clave en la evolución de nuestra especie, nuestros ancestros primates más antiguos comían principalmente fruta, pero especies posteriores como el Australopithecus ampliaron su gusto. Además de alimentarse con una variedad más grande de plantas, como las hierbas, parece que comieron mucha más carne e incluso que la troceaban con herramientas de piedra. Más carne supuso más calorías y menos tiempo de masticación.
Para los humanos, el parto es difícil y peligroso. A diferencia de otros primates, las madres casi siempre necesitan ayuda. Esto es porque caminar en dos piernas supone un canal pélvico más estrecho para el paso de un bebé humano, cuya cabeza ha crecido en relación a sus ancestros. Para compensar el parto dificultoso, los bebés nacen más pequeños e indefensos.
Nadie sabe cuándo nuestros ancestros aprendieron a controlar el fuego. La prueba directa más antigua proviene de la Cueva Wonderwerk, en Sudáfrica, que contiene cenizas y huesos quemados de hace 1 millón de años. Pero hay evidencias de que los homínidos procesaban los alimentos incluso antes y de que eso podía incluir cocinar con fuego.
ADAPTACIÓN DE https://www.bbc.com/mundo/noticias/2015/03/150317_ciencia_15_cambios_humanos_finde_np
[table “” not found /]1.1. Reconoce los cambios evolutivos hasta llegar a la especie humana. (TEMA 10)
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¿QUÉ TRABAJO TIENE EUDALD CARBONELL? BUSCA EN INTERNET LAS DIFERENCIAS QUE HAY ENTRE UN ARQUEÓLOGO Y PALEOANTROPÓLOGO.
¿POR QUÉ CREES QUE EL CAMBIO CLIMÁTICO DEL QUE SE HABLA EN EL DOCUMENTAL Y LA CONSIGUIENTE EXPANSIÓN DE LA SABANA HIZO QUE LOS PRIMATES COMENZARAN A ANDAR SOBRE LAS PATAS TRASERAS Y SE CONVIRTIERAN EN SERES BÍPEDOS?
¿CÓMO SE LLAMA LA PARTE DEL HUESO QUE NUESTROS ANTEPASADOS SE COMÍAN? ¿CÓMO CONSEGUÍAN EXTRAERLO?
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